Que hacer si tu gato se enferma

Los gatos son seres vivos y, como tales, también pueden enfermar. Por eso, no podía faltar esta sección dedicada a la salud del gato. Aquí podrás encontrar información sobre enfermedades, primeros auxilios y prevención de enfermedades. Pero lo más importante, es que cuando te encuentres ante un gato sano, recuerdes que también puede enfermar si nos descuidamos en su alimentación, higiene o vacunaciones.

Consulta siempre al veterinario, antes de hacer nada, porque en tus manos está la vida de tu gato. Queremos que comprendas que es muy importante que, si te encuentras ante un problema relacionado con la salud de tu gato, te tienes que dirigir siempre a un veterinario en primer lugar. Todo lo que puedas ver en esta sección, en otras webs, en libros e incluso en documentales, es posible que no sea absolutamente cierto o le falte algún detalle muy importante, bien por un olvido del autor o bien porque haya quedado desfasada esa información. Los que te van a informar en esta web no son veterinarios y, aunque sí lo fueran, tendrían que ver y estudiar a tu gato para encontrarle un tratamiento específico para él. Tu veterinario siempre estará mucho y mejor informado que cualquier otra persona, y sabrá qué es lo que más le conviene a tu gato.

No podemos tener nunca ningún ligero descuido, porque nos enfrentamos a la posibilidad de perjudicar la salud de un ser vivo. Sería imperdonable que ocasionáramos una gravísima enfermedad a un gato (o algo más crítico) por no haber puesto el caso en manos de un especialista como es un veterinario a tiempo, por habernos fiado de lo que habíamos leído o por habernos fiado de lo que nos dijo un amigo. La solución que le pudo dar buen resultado al gato de ese amigo, quizás le pueda costar la vida al tuyo.

Desde aquí, nos vamos a limitar a explicarte algo de esta faceta que tiene el gato, porque es un contenido que no se puede dejar pasar por alto en esta web. Las informaciones que te encuentres proceden de estudios superficiales. En el caso de que hayamos encontrado una dirección interesante sobre un tema específico, te la mostraremos, pero no estamos facultados para confirmar con exactitud ni con imposibilidad de error el contenido de dichas informaciones.

Cuando en nuestras casas enferma un gato, o sencillamente le notamos una anomalía, siempre nos ponemos en contacto con nuestro veterinario o con una clínica veterinaria, en un primer momento y antes de hacer nada, aunque sepamos con certeza lo que nos va a indicar el veterinario posteriormente. Si nosotros lo hacemos, tú lo tienes que hacer también. Consulta siempre a tu veterinario antes de hacer nada. En tus manos está la vida de tu gato.  

  

Estas son mis dos gatas, la rubia se llama Lily y es de raza persa, mientras que la negra se llama Cocha y es mezclada

Estres en los gatos

El estrés en los gatos es uno de los factores que puede provocar una convivencia complicada con tu mascota en tu hogar.

Los gatos, al igual que las personas, pueden sufrir de estrés y este estrés puede ser derivado de muchos factores: una situación nueva, un cambio de domicilio, un vecino ruidos, la llegada de una nueva mascota, un viaje, la soledad, alguna enfermedad, obesidad, etc. Es decir, cualquier cambio en la rutina diaria.
Normalmente, para saber que la mascota puede padecer de estrés, deberemos observar ciertos síntomas como: que no orina en la bandeja y orina en zonas no habituales, perdida de pelo, agitación excesiva, agresividad, etc. Si observamos que nuestro gato puede padecer de estrés, lo más recomendable es acudir al veterinario para saber la causa del malestar de nuestra mascota.
Para ayudar a que el gato no sufra de estrés deberemos tener en cuenta ciertos aspectos básicos. El primero de ellos es la bandeja del gato. Esta deberá estar siempre limpia ya que a los gatos no les gusta que la bandeja para hacer sus necesidades esté sucia. Además, esta bandeja no puede ser colocada en cualquier lugar de la casa. La bandeja deberá permanecer en un lugar tranquilo, evitando pasillo o habitaciones de mucho movimiento.
Además de los trucos caseros, en el mercado también podemos encontrar algunos productos que evitaran el estrés en los gatos. Uno de los más usados es uno que utiliza feromonas felinas. Estas pueden ser colocadas en un enchufe como un ambientador, o se puede pulverizar a modo de perfume o colonia.
Con estos trucos y productos lograremos que nuestro gato lleve una vida normal y agradable sin ningún estrés ni problema de salud.

 

La caída del pelo en los gatos es muy habitual sobre todo en primavera. A continuación veremos varios consejos para evitar problemas con las bolas de pelo.

Por lo general, la mayoría de los gatos pierde mucho pelo durante todo el año, pero en primavera, esta caída del pelo se acentúa. Por ello, sean gatos de pelo largo o gatos de pelo corto, es muy importante seguir ciertas pautas para evitar mayores problemas a consecuencia del pelo.
Puede llegar a ocurrir, que si no cepillamos al gato diariamente, se le tenga que cortar el pelo para evitar que al lamerse el cuerpo se le creen bolas de pelo en el estómago. Además, también se le pueden formar nudos que provocarán mayores problemas a la mascota. Todo suele derivar en problemas intestinales ya que pueden llegar tragar tal cantidad de pelo que no son capaces de digerir ni de liberar.
Para evitar problemas en los gatos por la caída del pelo, se recomiendan varias pautas concretas. Por un lado, es muy importante que el gato lleve una correcta alimentación. En el mercado existen alimentos específicos que previenen las bolas de pelo en el estómago Estos alimentos favorecen la calidad del pelo del gato y la salud de la piel. Así, logramos que el ga desprenda menos pelo y a la vez que trague menos. Además, este tipo de pienso también es muy adecuado para un correcto tránsito y así eliminar el pelo y evitar la formación.

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Otra de las medidas que se deben tomar, y la más básica, es el cepillado diario del pelo. Los gatos, tienden a lamerse mucho el cuerpo, y a raíz de lamerse tanto el cuerpo, tragan demasiado pelo. Si nos acostumbramos a cepillarles el pelo una vez al día, todo el pelo que recojamos con el cepillo, no acabará en el estómago de la mascota.

 

Gatos callejeros

Hoy en día nos encontramos con muchos gatos por las calles. Esto suele ocurrir bien por ser abandonados o bien por la reproducción de gatos callejeros. En ocasiones hay gente que lo recoge y lo adopta para su casa
En el caso de recoger uno de estos gatos callejeros y llevarlos a casa, puede ocurrir que al principio la adaptación del gato sea algo difícil. Al principio puede ocurrir que el gato tenga sus manías a la hora de aclimatarse al nuevo hogar, ya que a veces los gatos de la calle viene con algunas manías, parásitos...
Uno de los problemas más habituales en este tipo de adaptaciones de gatos en sus nuevos hogares suele ser la manía de buscar comida en la basura. Al vivir en la calle están acostumbrados a ello, pero por lo general, al ver que sus nuevos dueños le proporcionaban alimento de calidad y constante, dejan de hacerlo.

Gato balines:

El gato balinés es un gato muy estilizado, largo de tamaño y de pelaje muy fino y sedoso. De cuerpo ligero, es idéntico al siamés excepto en el pelo. Tiene las mismas capas de pelo que el siamés y manchas negras en la cara, las patas, las orejas y la cola, y un tronco largo y tubular muy esbelto y musculoso. .

Tiene la cabeza más larga que ancha, con el cráneo plano, el hocico estrecho y las orejas anchas y terminadas en punta. Sus ojos almendrados y la cola larga y fina, le dan un aspecto muy distinguido y misterioso. Aunque es muy ligero y sus extremidades muy delgadas, tiene buena musculatura, lo que le permite ser un ágil felino y con gran fortaleza.

Los ojos se rasgan a partir de la nariz. Las orejas anchas en la base y apuntadas, de gran tamaño con respecto al cuerpo. Las patas largas y esbeltas terminan en delicadas almohadillas ovaladas del color de la cola y la cara. El pelaje es semilargo y puede ser más largo en el vientre, en torno al cuello y en la cola.
Aquí hay una imagen del gato balines:

Gato azul ruso:

El Azul Ruso llegó a Europa procedente de Rúsia. Esta procendencia, unida a su color azulado, le dieron pronto su nombre, aunque habría que esperar bastante tiempo hasta que se le llamara como hoy lo conocemos. En un principio fue llamado “Gato del Arcángel”, “Azul Extranjero” y “British Azul”, hasta que finalmente adoptó el nombre por el que hoy lo conocemos. La raza estuvo a punto de desaparecer a mediados del siglo XX. Después de la II Guerra Mundial era dificil encontrar ejemplares de esta raza. Fue preciso recurrir a los Siameses portadores del gen azul para evitar su desaparición.

Esta es una imagen del gato azul ruso: